Mi nombre es Will Acha, y soy el fundador de Anima. Este proyecto nace de un lugar muy íntimo, fruto de una experiencia profunda de amor y sanación.

Todo comenzó cuando a mi hermana le diagnosticaron cáncer de ovarios. Ese momento nos sacudió por completo como familia, pero tras aceptar lo que estaba ocurriendo y en lugar de quedar atrapados en el miedo, tomamos la decisión de recorrer este camino de una manera diferente: como un profundo viaje de aceptación, presencia, resiliencia y transformación. 

Siento mucha admiración por ella y por cómo eligió mirar su proceso con otros ojos: cuidándose, escuchándose, y conectando consigo misma para cultivar una mentalidad de sanación.

Como músico, meditador y guía, puse a su servicio todo lo que había aprendido a lo largo de mi vida. Y así, a través de la visualización, el sonido y la meditación, encontramos una forma nueva de vivir este proceso, diseñando un espacio para transitar el cáncer desde la luz, la fuerza interior y la esperanza.

Fuimos testigos de cómo la meditación transformaba su relación con la enfermedad, y de cómo le acompañó emocionalmente, la fortaleció y le permitió crear silencio y visión dentro de ella. Y entonces lo supimos: esto no podía quedarse solo entre nosotros. 

Así nació Anima: un espacio para acompañar y empoderar a personas que atraviesan procesos complejos como el cáncer, ofreciéndoles un espacio de calma, reconexión y fortaleza interior.

Hoy, mi hermana sigue meditando cada día, comprometida con su bienestar, y ha encontrado un camino consciente de sanación. Ese mismo camino es el que queremos compartir contigo.